La bailarina estuvo en "El Diario de Mariana" y se refirió,
con lágrimas en los ojos, a la destrucción total de su departamento
alquilado en Las Cañitas donde perdió todas sus pertenencias y hasta el
dinero que tenía ahorrado.Noelia reflexionó sobre lo ocurrido positivamente y lo tomó como una señal divina:
"No estaba disfrutando de lo bueno que me pasaba y eso es raro en mí.
Era como ir y hacerlo por obligación lo del Bailando. Sentí que era otra
cosa, porque el departamento se destruyó y, por ejemplo, a mi mamá no
le pasó nada".La bailarina analizó: "Estoy tratando de averiguar qué me
pasa, algo interno mío, algo espiritual. Soy muy creyente y me pasa que
siento un vacío y hasta por un momento me parecía que era una máquina
que laburaba y no sentía. Igual, creo que es buenísimo que pase esto así
decís 'basta', no estaba disfrutando de todo lo que me pasaba. Es un
garrón lo que me pasó, pero pienso que esto que estoy buscando interno
es mucho más valedero que lo que perdí".Noelia se sinceró: "La frivolidad con la que se trabaja... Yo
renegaba de eso, pero me terminé contagiando. No me emocionaba lo mismo
que antes y no hay nada más lindo que te emocionen las pequeñas cosas.
Además, quizá descuidé la parte del amor y puse toda la libido en el
trabajo. Con respecto al Bailando, con Facu Mazzei veníamos muy cebados,
como una locomotora, y de repente me pasó esto. Casi que agradecí no
haber llegado a la final, lo lamenté por el sueño... pero lo que sucede,
conviene. Creo en esa frase fervientemente".Para el final, Pompa abrió todavía más su corazón y contó: "No
se sabe por quépasó lo de mi casa, yo creo que tuvo que ver con otra
cosa, con algo más espiritual. Algunos te tratan de loca cuando hablás
de eso, pero es lo que yo creo".
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