La terrible confesión de María del Mar sobre sus días con Matías Alé: "Llegué a ver lo mismo que veía él"

María del Mar Cuello Molar rompió en llanto al recordar tanto los momentos felices como los más duros durante su relación con Matías Alé, quien sufrió un delirio místico en noviembre de 2015 y por el cual estuvo más de 40 días internado. "Me casé enamorada. Yo llegué a ver lo que veía él, pero eran tantas cosas las que pasaban. No quería comer. No podía dormir. En el estado en el que estaba, no dormía. Y así como estaba lo místico, pasaban otras cosas, como pelearse con alguien. ¿Si temí por mi integridad física? Sí, pero tenía que cuidarlo de los medios, de la gente, de que nadie se enterara. Pero los últimos sucesos era muy notorios", confesó en Intrusos. Sobre la terrible noche que terminó con Alé internado, María del Mar reveló detalles tremendos e impactantes. "El médico había sugerido su internación, pero él se opuso. Entonces le recomendó unas gotas. Luciano Lasca, amigo de Matías, fue a comprarlas. En el departamento quedamos él, mi mamá y yo. Matías cerró la puerta y dijo: 'Ahora no entra nadie ni sale nadie más'. Puso música a todo volumen y rezaba a los gritos. Cuando Luciano volvió, no lo dejaba entrada. 'Abrile, que trae la comida. Tengo hambre", le dije. 'Si tenés hambre, me corto un dedo y vos te lo tenés que comer', me respondió", contó, entre lágrimas. "Me escapé del departamento como pude. Pero salió mi mamá y detrás Matías. Nos quedamos en el pasillo. Las dos en el piso y él arriba nuestro. Salieron los vecinos y nadie hizo nada. Y mirá que nosotras gritábamos. No hubo agresión física, pero cuando una persona está así, no sabés qué hacer. Ahí fue cuando se abrió el ascenso y veo muchos policías y médicos", agregó. Asimismo, aclaró por qué grabó a Matías Alé hablándole a un omelette. "Lo hice por pedido del médico. Necesitaba mostrárselo para que viera en qué estado estaba Matías. También para que lo viera mi mamá. Ya estaba cansada de tener que pasar todo sola. Nadie me ayudaba. Por eso los llamé a todos, a mi mamá, a Luciano, que fue quien llamó a ese médico", concluyó.