En 2010 la televisión le abrió una puerta más frondosa al género periodístico y le permitió un despliegue de propuestas parecidas, distintas y contrapuestas. Hubo blancos, negros, grises y de otros tantos colores, y un domingo convertido en su refugio natural.América volvió a sacar ventaja a la hora de programar ciclos periodísticos; sin embargo, no generó nuevas propuestas, sino que apostó a otras temporadas deGPS, Vidas paralelas, Calles salvajes y La Cornisa. Salvando el programa conducido por Luís Majul, los otros tres continuaron cultivando un periodismo callejero, que en varias ocasiones le cedió una buena cuota numérica al canal. Con respecto a La Cornisa, pasó a convertirse en extremo de un triángulo cargado de ideología, en el que también entraron en juego Seis, siete, ocho, en el otro umbral, y Bajada de línea, terciando entre ambos. En cuando al ciclo de Canal Siete, tuvo su versión diaria y su edición dominical y, potenció su rol de vocero de la posición oficialista, llegando incluso a ser la caja de resonancia del gobierno para cada posición polémica. Así logró que su repercusión se extendiera por fuera de la pantalla, y que el nombre del ciclo apareciera en otros ámbitos (manifestaciones, actos, homenajes, por ejemplo).
Sus no adherentes le siguieron machacando la ausencia de opositores en su estudio, en tanto que los "no amigos" de La Cornisa, se encargaron de definir al ciclo como "frívolo" y falto de variedad a la hora de los invitados. Entre tanto, se unió a este triángulo Víctor Hugo Morales, que en su vuelta a la tele se propuso "bajar línea" en Canal 9. Claramente volvió a demostrar que convalida con el modelo actual de gobierno, pero que, a su vez, puede escuchar y dialogar con "el otro", e invitarlo a su "casa". A su vez, Chiche Gelblung, por fuera de esta paleta de colores, con su acostumbrado color amarillo transitó la segunda temporada de 70.20.11, siendo fiel a su estilo, y saliendo de la difícil competencia de sábado, para encontrar su lugar y su rating en la noche de domingo.Hubo algo más de periodismo este año, aunque bastante menos que en épocas de gloria, en El 13 solo Chiche roza el rubro y en Telefe, nada.
Sus no adherentes le siguieron machacando la ausencia de opositores en su estudio, en tanto que los "no amigos" de La Cornisa, se encargaron de definir al ciclo como "frívolo" y falto de variedad a la hora de los invitados. Entre tanto, se unió a este triángulo Víctor Hugo Morales, que en su vuelta a la tele se propuso "bajar línea" en Canal 9. Claramente volvió a demostrar que convalida con el modelo actual de gobierno, pero que, a su vez, puede escuchar y dialogar con "el otro", e invitarlo a su "casa". A su vez, Chiche Gelblung, por fuera de esta paleta de colores, con su acostumbrado color amarillo transitó la segunda temporada de 70.20.11, siendo fiel a su estilo, y saliendo de la difícil competencia de sábado, para encontrar su lugar y su rating en la noche de domingo.Hubo algo más de periodismo este año, aunque bastante menos que en épocas de gloria, en El 13 solo Chiche roza el rubro y en Telefe, nada.
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