Cuando se filtraron las fotos del festejo de casamiento de Cabré y Tobal, todos los ojos apuntaron al ex custodio de Fort que, el día del evento, estaba a cargo de la seguridad. Entre otras cosas, se le había pedido que controlase ninguno de los empleados del lugar o personal ajeno al círculo íntimo de la pareja, pudiera tomar fotos para evitar, justamente, que fueran cedidas a la prensa. Lo cierto es que esta semana estalló la furia de los actores cuando un semanario publicó imágenes inéditas de dicha celebración. Entre otras cosas, se dijo que Cabré habría llamado a Dany la muerte para insultarlo y que Eugenia Tobal habría secundado a su esposo. Sin embargo, el custodio desmiente ese enojo y acalra los tantos. "En ningún momento me llamó para insultarme. Si hubiera sido así, lo diría porque me la banco. Pero no es cierto". "Eugenia está muy dolida porque ningún periodista tuvo acceso a la fiesta, lo que deja en evidencia que fue una persona de su círculo más íntimo", añadió. El custodio asegura que fue él mismo el encargado de comunicarle a los periodistas y fotógrafos que hacían guardia fuera del salón, que los novios no saldrían a saludarlos. "Hace 28 años que laburo en la calle y entiendo más que nadie el trabajo de los periodistas. Por eso hablé y les dije que no iban a salir para que no se queden hasta las 7 de la mañana cagándose de frío", explicó. "Dentro del lugar, ellos estaban tranquilos porque sabían que sólo había personas de su entorno más íntimo. Eso es lo que le duele a Eugenia".
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