Después de ser una potencia sexual hace unos años, ahora Robbie Williams necesita de inyecciones de testosterona para subir la libido, el deseo, según confesó el propio artista inglésEl ex amigo de Amalia Granata, comentó que fue al médico porque se sentía cansado y desganado, con intención de conseguir una hormona de rejuvenecimiento, “la hormona de crecimiento somatotropa”, confesó Robbie Williams a la revista “Esquire”, y agregó que “es lo que hacen todas las personas mayores de Los Ángeles, que están consiguiendo aparentar 40 años en vez de 60”.Pero parece que los profesionales le diagnosticaron que su problema es que tenía “la testosterona de un hombre de cien años de edad” confesó Robbie y dijo que el tratamiento le cambió la vida.Desde ese entonces se inyecta testosterona dos veces por semana, y asegura que su vida es otra gracias a esas inyecciones (laubfal)
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