"Hoy soy un hombre pleno, un padre (Catalina de 2 y Amanada de 3
meses) que encontró el amor de su vida (su mujer María). Nunca dejé que
me llenaran la cabeza ni me prostituí en el medio. Este es un ambiente
que trata todo el tiempo de jugarte malos momentos", declaró Santiago
del Moro al diario Muy."Soy un trabajador. Empecé desde muy abajo admirando a los
grandes conductores de la tele. No entré acá para ser famoso, ni para
hacer lío. Me esfuerzo todos los días por hacer lo que amo. Tomo mi
profesión como mi filosofía de vida"."La mayoría de las veces trabajamos desde la carencia.
Dependemos de las noticia y hay veces que, al no contar con una
superproducción, la nota no está. Pero tenemos que salir a ponerle el
pecho y remarla", concluyó.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario