Nazarena Vélez transita uno de los peores momentos de su vida.El lunes 24 por la noche, Fabián Rodríguez, su esposo y padre de su tercer hijo, Thiago, de tres años, decidió quitarse la vida. El empresario de 47 años se ahorcó en medio de problemas financieros, con la Justicia, y en plena crisis matrimonial. Desde
entonces, fotos, videos y frases recordando sus momentos felices
inundan las cuentas de las redes sociales de Nazarena, quien no deja de
buscarlo. Y, por eso, el sábado por la mañana, la decidió
ir al cementerio aun sabiendo que su esposo ya no está ahí. Quizás para
comprobarlo.La actriz llegó alrededor de las 11 de la mañana al Jardín de Paz de
Pilar acompañada de su madre, Ana Rosa. Destrozada y con el aplomo de
quien necesita confirmar que “ya no está”, compró flores, gerberas
amarillas y blancas, y se fue hasta el sector Cardenal, donde el
miércoles fue enterrado el cuerpo de Fabián Rodríguez. Allí, se sentó en
el césped y, frente a la lápida, lloró sin consuelo mientras su mamá
trataba de sostenerla y le recordaba las palabras que le había dicho su
padre, José, el día del entierro: “Vas a poder salir adelante”. El
llanto desgarrador llegó a su fin cuando Ana Rosa la ayudó a levantarse
del suelo y entonces, casi una hora más tarde de su llegada, se fueron
en el Mercedes en el que habían llegado con la productora al volante.
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