"Tuve miedo durante la internación. A veces es inevitable. Yo soy optimista y
celebro la vida, pero soy papá. Soy vulnerable si a un hijo le pasa algo. Cuando
vine a Mar del Plata estaba medio en estado de shock, llorando, y mi amigo no me
dejó manejar solo. No sabía que me iba a encontrar cuando llegara. Mirá si llego
y no está más despierta", confesó Axel en una entrevista con la
revista Paparazzi sobre la grave situación de salud que sufrió su hija
Agueda, quien tuvo el síndrome de Kawasaki."Fue una semana muy angustiante. Ese síndrome afecta la parte motriz, genera
una artrosis momentánea. Agueda no podía caminar. Tenía ronchas en las piernas,
espalda, genitales, cuello", agregó el cantante.Cuando el martes ya estaba saltando de la cama, yo no lo podía creer. Los
chicos son así: de un día para el otro cambian un montón. Se recuperó rápido
porque, me dijeron, tiene un sistema inmunológico muy fuerte. Ahora podrá hacer
una vida normal porque no tiene secuelas", concluyó.
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