Adriana Lorenzón es una guionista que conoce el éxito, ya que fue autora de Montecristo y Los Roldán, entre otros. Ahora, a cargo de El Elegido (con Pablo Echarri y Paola Krum), explica por qué la novela no puede superar en rating a su rival de El Trece, Herederos de una venganza (con Luciano Castro y Romina Gaetani). “Hay un montón de factores que influyen. El Trece tiene una programación que hace que la pueda mirar el mismo público. Telefe, no. Cada programa tiene un público diferente. El que mira El Elegido, odia Gran Hermano. Por otro lado, a nuestra novela la miran los profesionales, los hombres, gente intelectual, y a Herederos muchos niños y mujeres. Mi sobrina ve la competencia porque dice que la entiende, porque es igual a Valientes. Además, Luciano Castro es un galán maravilloso, y Pablo Echarri ya busca otras cosas y ha hecho una evolución muy grande en la parte actoral. Igual, no estoy dispuesta a matar a nadie por un punto de rating”, comentó Lorenzón en una entrevista con Semanario. “De todos modos, el rating que hacemos no está mal. No es como antes, que con Los Roldán hacíamos 36 puntos, o como Grande Pa que hacía 70. Ahora la gente tiene la alternativa de ver los capítulos por Internet, en nuestra web hay 330 mil entradas por día”, se defendió y aclaró que “el éxito es una cuestión relativa. La plata se la llevan otros. Hay una gran fantasía de que la tele es como un cajero automático, y que desde que entrás ganás mucha plata. Y en realidad es más parecido a un trabajo coreano”.“Pongo la energía en detectar lo que falla. Ya me ha pasado de tener que liquidar gente, cambiar un elenco entero, de que un productor me llame y me diga ´cada vez que aparece pirulo baja el rating´ y no me gusta porque en general son caprichos. Además, me parece absurdo porque la novela no es un programa en vivo. Prefiero ser cajera de supermercado antes de escribir algo que no me guste.
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