Matías Alé, quien confesó que sufre de una obsesión por el sexo a la que intenta controlar mediante un tratamiento, mantuvo una conversación telefónica con Guillermo López: “Estamos en el hotel en el que para Maravilla, mañana vamos a ir al pesaje”.Pero fiel a su estilo, contestó con picardía a la pregunta sobre si le interesaría tener algo con la diva de los teléfonos, que estará allí también: “Me encantaría cruzarme con Susana. Hay muchos eventos donde uno puede encontrarse tanto antes, como después de la pelea, todo puede ser. Realmente es una prueba de fuego, si paso estos días sin inconvenientes, me va a hacer bien”.Luego contó “hablé con Marcelo Tinelli, me contó que le encantaría venir pero que no puede porque tiene que hacer jueves y viernes el programa en vivo”.Finalmente describió su beso apasionado con Carmen: “Se dio en el momento, no fue planeado. Después yo hice el viaje y la distancia nos separó”, afirmó con su típica picardía.
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