Quique Estevanez no asistirá a los premios Martín Fierro
que se llevarán a cabo en el hotel Hilton el domingo 18 de mayo, como ya lo
había ratificado el
año pasado. "Yo no voy más hasta que no demuestren que puedo volver a
creer en ellos. Ellos mezclan peras con bananas y no tiene nada que ver. Una
comedia no tiene nada que ver con una telenovela", aseguró el productor televisivo.En esta premiación, Estevanez tiene cuatro nominaciones por la novela
Dulce amor: Mejor Ficción Diaria, Mejor Actor Protagonista de Ficción
(Juan Darthés) y Mejor Actriz Protagonista de Ficción (Carina Zampini – Laura
Novoa)."No tengo ganas de pasarla mal, ni me interesa que me juzguen. Si me
nominaron, que me nominen, si no gano me da lo mismo. No me gustó como arman los
rubros, yo he ganado Martín Fierro, cualquier puede pensar que lo digo porque no
gané, pero gané unos cuantos. La verdad es que no me importa, me importa tener
buen rating. No me importa ser primero en rating, me importa que al público les
gusten mis productos", explicó Quique.Además, aseguró que no le va a prohibir a los integrantes del elenco de
Dulce amor asistir al evento: "Yo no le puedo prohibir a nadie que vaya. Eso
va por cuenta de cada uno, el que quiere ir que vaya. Es un tema que lo
resolverá cada uno de ellos. Yo no busco solidaridad con ellos, yo lo único que
quiero es que cada uno haga lo que sienta, por ahí estoy equivocado y otro
piensa de otra manera".Por otra parte, se refirió a su próxima novela Camino al amor,
cuyo estreno está previsto para el mes que viene en el prime time de Telefe.
El productor volverá a repetir a los protagonistas del éxito de Dulce
amor: Carina Zampini, Sebastián Estevanez y Juan Darthés. También
formarán parte del elenco figuras destacadas como Mariano Martínez, la "China" Suárez y Rodolfo Bebá.Este año, Quique tendrá el duro desafío de competir contra Marcelo
Tinelli: "Me enorgullece enfrentar a Tinelli porque perder con él para mí es
un orgullo. Para mí es el número uno de la Argentina lejos... Con Camino al amor
voy a poner los mejores condimentos como lo hice en Dulce amor, pero el
condimento mayor es que al público le guste".También se refirió al gran éxito de Avenida
Brasil que se convirtió en el programa más visto de la TV abierta:
"Es un fenómeno con todas las letras. Está muy bien escrita y producida, es
una novela bien hecha, cuando las cosas son bien hechas salen bien. Hay muchas
cosas que tiene que tener una novela para que sea buena: química entre los
actores, química entre la producción y la autoría o entre los actores, la
producción y la autoría. Esa novela tuvo un gran equipo de trabajo. Es
distinta, rompió los cánones de las novelas tradicionales. Pensás que una actriz
va ir por un lado, pero no lo hace. Te hacen creer una cosa y pero te muestran
otra, es para sacarse el sombrero".
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