La astróloga Aschira confirmó la relación familiar que la unía a
Ricardo Fort en un reportaje que le dio al diario Perfil en diciembre de
2009.Allí contó, por primera vez, que ella se había casado Felipe Fort,
abuelo de Ricardo y creador de Felfort en el año 1964 vía México y que
fruto de su relación había nacido Paloma Fort. La abuela de Ricardo le
pidió al empresario que la reconociera públicamente como la esposa de su
abuelo para así dejar de ser la “amante de Felipe Fort y dejar de vivir
en la clandestinidad familiar”.En ese reportaje, Aschira predijo la muerte prematura de su nieto
Ricardo. “Yo se que Ricardo va a morir joven. Estoy segura de eso. El
tiempo me va a dar la razón”, aseguró desde el departamento del barrio
de once donde vivía con la solitaria compañía de su perra Chocolina y
una asistente que le hacía la comida.Tiempo después Aschira abandonó el país y se mudó a España con su
familia originaria. La repentina mudanza de Aschira a Europa que
despertó la sospechas de Paloma Fort, hija de la astróloga. Paloma, hoy
enfrentada a su madre comentó que: “Creo que la familia Fort le dio
dinero a mi madre para que se fuera del país y no molestara más. Ahora
esta viviendo en España”.El mismo Ricardo Fort comenzó a palpitar su final luego del episodio
de peritonitis aguda por una perforación en el duodeno del que
sobrevivió, en febrero en Mar del Plata.Mariana Fabbiani entrevistó a Fort quien estaba padeciendo de fuertes
en Miami y le confesó que: “Toda mi vida sentí que me iba a morir joven
y a partir de lo que lo que tuve en el verano, siento que debería haber
muerto ahí. Siento que este tiempo que tengo prestado es como para
aprender algo en esta vida”, confió.Y agregó: “Hay momentos que nadie puede entender el dolor que tengo. Es
tan fuerte. Me siento cansado y débil. Toda la vida luché por ser famoso
y de repente aparecí en un programa como el Bailando, pero la vida me
quitó el poder de demostrar lo que sé hacer porque no puedo ni moverme. Y
eso es lo que no entiendo, porque me da mucha frustración. Podría hacer
teatro y no puedo ni caminar. La vida que estoy viviendo ahora, no es
vida”, aseguró antes de su última internación en el Sanatorio de la
Trinidad.
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