Luego de finalizar su gira por Sudamérica, que incluyó su polémico paso por la Argentina, Justin Bieber decidió celebrar.Antes de su show en México, que ofreció anoche, no sin antes pasar un fenomenal papelón que incluyó a la presidencia de esa país,
el canadiense realizó una fiesta en su residencia en Los Ángeles,
aunque poniendo una gran condición: hacer que sus invitados y
trabajadores firmaran un contrato de confidencialidad. De filtrarse
información, el cantante cobraría US$ 3 millones a quien revelara
detalles del evento.Su aprensión surgió luego del encuentro entre Bieber y una brasileña durante su visita a ese país. La chica, que aseguró pasar la noche con el artista, difundió un video donde aparece el cantante de 19 años durmiendo junto a ella.Sin embargo y a pesar de las precauciones, ya fueron revelados
detalles del evento. Según informó el portal norteamericano TMZ, en la
fiesta había unas 20 stripers, en quienes el artista habría desembolsado
más de US$ 10 mil en efectivo.El medio también reveló algunos de lo invitados: el boxeador
norteamericano Floyd Mayweather; el cantante y ex pareja de Rihanna,
Chris Brown; el músico de R&B, Trey Songz, además de los raperos
Snoop Dogg y T.I.De acuerdo a la información entregada por el mismo medio, la fiesta
contaba con tres barras libres, las que aumentaron la efervescencia de
los asistentes hasta hacer que la policía fuera llamada por los vecinos
por “perturbar la paz” en los alrededores.
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