El ciclo de espectáculo que se caracterizó por mutar durante sus ocho
años de aire en la pantalla de América, dio su segundo giro impensado
en menos de dos años. De Santiago Del Moro a Rodrigo Lussich, un futuro
incierto se acerca junto a Pia Shaw. El programa que se nutrió de los caídos en desgracia luego de
gloriosos pasados televisivos, de las peleas mediáticas que rozaban lo
bizarro, y del rojo fuego que decoraba la pantalla, hace poco más de un
año que decidió renovarse. La llegada de Rodrigo Lussich implicó un
punto de giro para una nueva imagen, como para reforzar la ausencia de
quien le había dado vida al ciclo.Aquel 18 de diciembre de 2014 la propuesta de Infama cambió
para siempre. Nuevos aires llegaban para modificar su contenido, sin
descuidar a la tan valorada farándula, pero primó lo periodístico y la
era Gran hermano.Sin embargo, el rumbo del nuevo programa de las tardes tampoco llegó a
destino. Lussich pronto recibió compañía de una co-conductora y más
tarde decidió alejarse del formato.Los antecedentes en nuestra tele existen. La suerte que hoy corre Infama es parte de la historia de Pulsaciones, Lo sabe no lo sabe y Zapping,
entre otros, que al cambiar de conductor y modificar su contenido puede
cargar con el karma de sentirse comparado por el público hasta el
final.¿Pero cuál será el final para Infama?.Hoy el ciclo perderá a su segundo conductor y quedará en manos de
quienes llevarán la difícil tarea de hacerlo navegar por las mismas
aguas, o probar un nuevo camino para que pronto la audiencia de el visto
bueno.
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