La semana pasada marcó un antes y un después en la carrera de
Fernanda Iglesias. La panelista le pegó un cachetazo a su compañera
Andrea Taboada y fue suspendida. Pero no terminó ahí: la periodista no
se quedó en el molde y la siguió en otros medios e incluso hizo pública
una conversación privada que tuvo con Fabián Doman, el conductor del
ciclo, que decidió echarla. "Andrea quería quedarse
y que yo me vaya. Ella me serruchó el piso. Es un lobo con piel de
cordero. Después, hizo un raid mediático", disparó Iglesias en diálogo con Radio 10, disgustada. Sostiene que Taboada cargó las tintas contra ella luego de la agresión para ocupar su lugar. Además,
Iglesias reveló que no fue la productora Endemol la que la despidió,
sino que fue el productor ejecutivo del programa, que casualmente es su
marido, por órdenes de Doman. "Mi marido, el
productor ejecutivo, me echó del programa. Yo no trabajo para la
empresa. Con Endemol está todo perfecto. El que no me quiere más es
Doman", confesó. Taboada, en llamas, salió a responderle: "Todos
estamos cortando clavos con el tema del laburo, yo no quería que ella
se quede sin trabajo. ¿Cómo voy a festejar que alguien se quede sin
trabajo? Es una locura pensar eso."
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