Desolado, muy triste, sin quitarse las gafas oscuras y apoyándose en
su mujer Raquel Perera. Alejandro Sanz ha sido el primero en acudir
junto a la familia de Paco de Lucía, cuyos restos han llegado a España
desde México esta mañana de viernes. El artista, muy afectado por la
pérdida de su gran amigo (el músico era padrino de su hijo Dylan), dio
el pésame a los familiares del guitarrista en su casa de Madrid.“Nadie se lo esperaba porque Paco era un hombre fuerte en todos los
aspectos. Paco es un genio y es así como lo tenemos que recordar. Una de
las pocas cosas que me alegra hoy es ver cómo la gente reacciona ante
la pérdida de un genio como Paco y ver el cariño que todo el mundo le
tiene” dijo Sanz.Desde primera hora de la mañana, decenas de personas hacían cola a
las puertas del Auditorio Nacional de Madrid. Cientos de seguidores y
apasionados del flamenco han acudido a rendir un último homenaje al gran
maestro, cuya inesperada muerte ha dejado huérfano el mundo del arte.A mediodía llegaba el Príncipe de Asturias a dar el último adiós al
maestro de la guitarra y dar el pésame a los familiares. Ha coincidido
en la capilla ardiente con Alejandro Sanz, a quien ha saludado
cariñosamente y después se ha acercado a la familia para darles un
abrazo. Felipe ha permanecido 15 minutos en el interior de la capilla
ardiente y en esta ocasión no ha podido acompañarle la princesa Letizia
porque se encontraba en el Senado, presidiendo el Día Mundial de las
Enfermedades Raras.Por allí también han pasado representantes políticos como la
alcaldesa de Madrid, Ana Botella, el ministro de Educación de España,
Jose Ignacio Wert, la delegada del Gobierno de Madrid, Cristina
Cifuentes; además de grandes amigos y compañeros de profesión de Paco de
Lucía como Ana Belén y Víctor Manuel.
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